Los teatros Cervantes y Echegaray reciben en mayo y junio los siete conciertos del Festival Internacional de Música de Cámara organizado por Jesús Reina y Anna Nilsen

La segunda edición de Málaga#Clásica hace parada en el folclore de Hungría, Rusia, EEUU, Noruega, Alemania, Austria y España en siete conciertos que se celebrarán entre el 25 de mayo y el 1 de junio en los teatros Cervantes y Echegaray. Los violinistas Jesús Reina y Anna Nilsen, directores artísticos de este Festival Internacional de Música de Cámara, han diseñado un recorrido por los vínculos entre las músicas populares y la llamada culta que apela a los verdiales y el flamenco, las danzas húngaras, las canciones y bailes rusos, noruegos o alemanes, los espirituales o el jazz. La huella que tales sonidos imprimieron en la obra de Bartók, Rimsky-Korsakov, Tchaikovsky, Gershwin, Grieg, Schubert, Brahms, Falla o Turina protagoniza unos programas que serán interpretados por jóvenes instrumentistas europeos, asiáticos y norteamericanos, un puñado de prestigiosos profesionales a los que se suman grupos folclóricos de los países a los que se dedica cada jornada.

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, presentó esta mañana el programa de la edición 2014 junto al malagueño Jesús Reina y la noruega Anna Nilsen, quienes desempolvaron sus violines para responder a la panda de verdiales de Teatinos, de estilo Los Montes, que compareció en el Salón de los Espejos del Ayuntamiento. Así demostraron ante los medios de comunicación los lazos que unen las dos orillas musicales a las que aluden el título y el subtítulo del Festival: Málaga#Clásica. Inspirado en el folclore. De hecho, en la biografía de sus directores también aparece ese vínculo. El violinista malagueño es hoy un reputado solista que toca en el Carnegie Hall de Nueva York, en las salas de la Filarmónica de San Petesburgo, en Otawa o Londres, pero comenzó su meteórica carrera tocando su instrumento en la panda de verdiales de San José del Viso a las órdenes de su abuelo y ‘alcalde’, José Reina.

Francisco de la Torre, a quien acompañaron en la presentación el concejal de Cultura, Damián Caneda, y la gerente del Teatro Cervantes, Charo Ema, recordó el esfuerzo realizado por los directores del Festival y los teatros municipales en la contención de los precios: todas las localidades tienen un precio único de 10 euros, y los abonos para los siete conciertos cuestan 40 euros. Las entradas se pueden adquirir desde hoy en las taquillas del Cervantes y Echegaray, por teléfono (902 360 295 – 952 076 262) e Internet (www.teatrocervantes.es, www.unientradas.es). El primer edil también anunció que el Museo Interactivo de la Música de Málaga (MIMMA) ofrecerá una entrada gratuita a cada persona que posea un ticket para asistir a alguno de los conciertos de Málaga#Clásica.

El violinista Regi Papa, los pianistas Edvinas Minkstimas, Josu de Solaun, Anna Petrova y Christopher Schmitt, los violas Chieh-Fan Yiu, Matthew Lipman y Jesús Rodolfo Rodríguez, los chelistas Dmitri Atapine, Hiro Matsuo y Carmen María Elena González, la clarinetista Christine Carter y los tenores Nils Georg Nilsen y Aurelio Gabaldón acompañan a los violinistas español y noruega en los programas. Muchos de ellos ya comparecieron en la primera edición, que se subtituló A través del tiempo en clara alusión al carácter histórico y didáctico de un recorrido desde los inicios de la música de cámara en la época barroca hasta las composiciones de los siglos XX y XXI. Al igual que en 2013, la nueva cita con Málaga#Clásica exprime su veta pedagógica con clases magistrales abiertas al público, clases particulares a alumnos malagueños e internacionales, cursos a grupos de cámara, charlas introductorias a los conciertos y una estrecha colaboración con conservatorios de toda la provincia. Entre el 17 y el 24 de mayo, el Conservatorio Superior de Música de Málaga acogerá la Academia de Málaga#Clásica, que se cerrará el 24 con un concierto abierto al público en la Sala Falla.

“Somos muchos los músicos clásicos y demás artistas que nos iniciamos en el folclore”, comentan Jesús Reina y Anna Nilsen en el texto de presentación de Málaga#Clásica. Los violinistas y directores del ciclo citan a Turina, Debussy, Grieg, Tchaikovsky, Stravinsky, Bach, Beethoven o Brahms como ejemplos de compositores que tomaron como base el folclore de su país y el de otros que consideraban exóticos como inspiración para su música. Además de la confección de los programas con obras que reflejan esa ‘contaminación’ de lo ‘popular’ en lo ‘culto’, cada una de las jornadas del Festival Internacional de Música de Cámara contará con la actuación de una banda folclórica del país correspondiente. Siete agrupaciones de Hungría, Rusia, EEUU, Noruega, Alemania, Austria y España cuyos nombres se anunciarán próximamente complementarán la interpretación de obras de cámara de los distintos ‘ensembles’ formados por los solistas. En total, más de 30 músicos tocarán ante el público.

El programa comienza el domingo 25 de mayo en el Teatro Echegaray con un concierto de presentación en el que se escuchará el Quinteto para piano y cuerdas en La mayor de Dvořák y el Quinteto de cuerdas en Sol mayor de Brahms. El primer país visitado es Hungría. El lunes 26 se rememorará en el Echegaray la impronta de la música zíngara en Dvořák, Ravel y Brahms, y se interpretará Contrast para violín, clarinete y piano, de Bartók, un compositor clave del siglo XX que además es considerado como uno de los fundadores de la etnomusicología por su trabajo junto a Kodály en la recuperación de la memoria sonora del folclore húngaro.

Glinka, el padre de la música clásica rusa, encabeza el recital del martes 27 en el Teatro Echegaray. Junto a una selección de sus canciones, el programa incluye obras de dos de Los Cinco, Rimsky-Korsakov y Borodin, y dos de las piezas en las que Tchaikovsky y Stravinsky (su célebre La historia del soldado) recogieron la semilla del folclore de su país. Y de Rusia hasta otro gigante, los Estados Unidos de América, con visitas al repertorio de tres grandes compositores de la nación norteamericana, George Gershwin, Aaron Copland y Charles Ives, y obras de Ravel y Dvořák en las que se trasluce la influencia del jazz y la música afroamericana (jueves 29, Echegaray).

Noruega protagoniza la velada del viernes 30 (Echegaray). Su compositor nacional, Edvard Grieg, estará representado con su Cuarteto de cuerda en sol menor, una de las obras más sobresalientes de un músico netamente influido por la naturaleza y el folclore de su bello país. También se escucharán en Málaga composiciones de Johan Kvandal, Johan Halvorsen, Agathe Backer Grøndahl y Øisten Sommerfeldt. La música folclórica alemana y austriaca está agrupada en el cartel del sábado 31 (Echegaray), con obras de Haydn, Mahler, Schumann y Schubert, piezas en las que se constata la presencia de los bailes campestres, los cuentacuentos populares y las canciones inspiradas en la tradición o la literatura germánica.

Málaga#Clásica se clausura el domingo 1 de junio en el Teatro Cervantes con una muestra de la música española en la que el flamenco tiene un importante protagonismo. Las Siete canciones populares españolas de Falla y la Escena andaluza de Turina con su adaptación de los verdiales al estilo de los Montes comparten programa con una versión en ruso de Shostakovich de canciones españolas, un quinteto de Granados influido por los zíngaros húngaros y una pieza de Sarasate inspirada en su tierra.